Definitivamente no me gusta Murakami. Lo he intentado, tras leer hace un tiempo "Tokyo Blues", pensando que quizá se equivocó de medio y me iban a gustar más los cuentos. Pues parece que no.
El primer cuento, el que da título a la recopilación de relatos escritos durante x años (del orden de veinte)... "Sauce ciego, mujer dormida" a mí personalmente me parece una paja mental sin sentido en la que me da a entender que su definición de relato es una narración corta, y punto. Trata de un chico joven que acompaña a su sobrino pequeño al hospital, porque padece de una sordera extraña... y nada ocurre con su sordera al final, oye… y yo que ya le tenía cariño y me sentía identificada.
En el autobús de camino al hospital, no entiende por qué va tan lleno de gente si no es hora punta... y llega a la conclusión de que es por culpa de un grupo de ancianos tostados por el sol y uniformados de excursionistas. Y casi lo que más te intriga de todo el relato es ese grupo de ancianos, y no por nada... sino porque Murakami da mucho la turra con que es un grupo muy extraño... Bueno, pues nunca sabremos qué tenían de raro un grupo de jubilados excursionistas. Seguro que ellos están tan flipados como yo, pobretes.
Y para rematar... paja mental total cuando el joven, esperando a que su primo salga de la consulta, hace un "remember when" de los años más jóvenes en los que acudía a un hospital a ver a la novia de un amigo (joder, esto huele a Tokyo Blues... dosifica tus recuerdos obsesivos Haruki...). La chica escribe un poema que quiere ser misterioso (o qué sé yo) sobre sauces que no son sauces, y mujeres dormidas en una casa en lo alto de una colina, todo muy “Bella durmiente”...
Total, que uno no sabe qué ha pasado, más que con alfileres, y acabas sospechando que Murakami tampoco sabe gran cosa más de sus protagonistas: Ni qué pasó con el primo sorderas… ni qué fue del amigo que murió, no se sabe cómo… ni qué fue de la novia en el hospital que escribía un poema pedorro sobre sauces con-pinta-de-otra-cosa, ni qué tenían de extraño los pobres viejos aparte de estar como un tizón siendo japoneses… Vamos, que no te enteras de la misa a la media y encima al terminar de leer piensas:
¿A ver si el quid de la cuestión va a ser que soy gilipollas?
¿A ver si no lo he pillado?.
Yo creo que Murakami se pone a escribir y ni él mismo sabe dónde va a ir a parar. Y al final acaba siempre con finales abiertos y tonos misteriosos... no le queda otra, supongo, porque se debe perder más él escribiendo que yo leyéndole (que ya es decir).
En fin. Que NO me gusta.
3 amiguetes que comentan.:
Me ha gustado mucho tu relato, seguro que incluso más que el de Murakami pero a mi me sigue gustando. En relato corto no lo se, pero "Kafka en la orilla" me engancha y crea un mundo sensitivo paralelo que me resulta sugerente e interesante.
No te lo recomiendo.
De la postadata que pusiste en concursos denota que me conoces.
Muchos, muchos besos.
A mí su novela "Cronica del pájaro que da cuerda al mundo" me encantó. En cambio "Tokyo Blues" me pareció una versión light de esa otra novela. No he leído nada más, pero creo que tu juicio es demasiado severo.
Saludos.
Es severo, sin duda, me he pasado un poco... pero es que el relato me estaba gustando y me esperaba cualquier final menos un no-final. Que no es santo de mi devoción está claro... pero no me hagas mucho caso que al final le saco punta a todo para hacer cuatro chistes.
Eso y que los ancianos excursionistas se merecían un relato para ellos solos.
Saludos.
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